Las aves de pequeños humedales aislados cercanos a la actividad humana tienden a desaparecer

Un nuevo estudio de la Wildlife Conservation Society ha encontrado que las poblaciones muchas especies de aves boreales icónicas del estado de Nueva York en Estados Unidos están disminuyendo. Las causas a las que lo achacan son varias: cambios en el tamaño de los humedales en los que  habitan, en la conexión entre humedales y su cercanía o lejanía a infraestructuras humanas.

aves boreales

Las especies que habitan los límites de distribución de un ecosistema se enfrentan a más complicaciones que aquellas que habitan en sistemas más homogéneos, y por tanto, son más vulnerables a los impactos del cambio climático. Debido a esta complejidad existe mucha más biodiversidad en estas zonas límite. En el caso de de este proyecto, la ubicación estudiada es Adirondacks en el estado de Nueva York ya que es una zona de gran turismo de avistamiento de aves o birdwatching.

Las aves estudiadas habitan la zona más meridional de la distribución global del bosque boreal, donde este bosque está mucho más fragmentado que en zonas más al norte.

En su estudio, los autores exploran los patrones de distribución a través del tiempo de ocho especies de aves boreales en los humedales de las tierras bajas del bosque boreal. Este estudio presenta una evaluación de cómo puede influir el cambio climático y la alteración del hábitat en la distribución de las especies a través del tiempo.

Entre las conclusiones extraídas la superficie y conectividad de los humedales es importante pero también lo es la cercanía a las infraestructuras humanas ya que las poblaciones de aves tienden a desaparecer de humedales pequeños aislados cercanos a zonas con infraestructuras humanas. Uno de los factores que se considera como una posible causa es la llegada de especies más cosmopolitas asociadas a seres humanos pueden desplazar a las poblaciones residentes lo que supone otro factor adicional a la disminución de estas poblaciones.

En el estudio se valoró la posibilidad de que estas poblaciones se desplazaran hacia tierras más al norte aunque no se han obtenido conclusiones claras acerca de que esto esté sucediendo.

Estos datos aportan más información a la hora de planificar el desarrollo urbano y la gestión de espacios protegidos, por lo que son una línea de investigación a proseguir.

Licenciada en Biología con las especialidades ambiental y marina por la Universidad de Alicante.