El canal Today News, publicó el pasado 1 de agosto la noticia. Un misterioso lago que apareció en mitad de la nada en medio del desierto de Túnez.
El calor aprieta y, a veces, la solución aparece como por arte de magia. En el desierto de Túnez ha aparecido un lago misterioso de aguas cristalinas y turquesas que se ha convertido en un lago verde, de aguas turbias llenas de algas. Los tunecinos han bautizado este lago Gafsa Beach y no han dudado en darse un baño refrescante ante esta oportunidad.
La aparición del lago ha sorprendido a los lugareños pues la zona es muy seca y llega a alcanzar un tamaño de alrededor de 1 Ha y la zona más profunda es de unos 15 metros en el lado más profundo. Un lago nada desdeñable.
De momento no se sabe cómo se ha formado el lago pero la teoría predominante se basa en que un temblor fracturó una capa de roca que confinaba una reserva de agua subterránea que ha aflorado a través de la grieta y ha rellenado el cañón donde se ha detectado este lago.
Después de que el lago se descubriera, las autoridades de Gafsa alertaron a los visitantes de que evitaran bañarse en el lago ya que se desconoce la salubridad de las aguas de baño. Se especula con que el agua puede ser peligrosa para el ser humano o cancerígena, e incluso radioactiva ya que hay minas de fosfato en la región. Sin embargo, esto no ha impedido que los lugareños disfruten de su nueva playa.
La naturaleza es sorprendente y cuando parece que lo hemos visto todo, de nuevo nos regala otro nuevo misterio.
Las lagunas nacen en los desiertos por la influencia del sembradío de gran cantidad de árboles con el método de la Neumoponia. Y el mayor alimento de los árboles es el carbón. Y el carbón está contenido en el CO2, que abunda en la Atmósfera. Cuando es consumido el carbón queda el oxígeno que se mezcla con el abundante hidrógeno, existente en la atmósfera, para producir agua A la Cumbre Climática de París le pedí que controlaran el sembradío de árboles. Pero, parece, que no lo hicieron.