La nomenclatura zoológica se realiza en base a la evolución del reino animal. Son dos ciencias las que se encargan de organizar el reino animal, por un lado está la sistemática y por otro está la taxonomía. La sistemática es la ciencia que se encarga de crear las categorías según las cuales se clasificarán a los animales según el grado de evolución, ancestros… y la taxonomía es la ciencia que se encarga de clasificar a los animales en las categorías.
Históricamente, muchos hombres han intentado encontrar una clasificación de los seres vivos, incluido entre ellos Aristóteles, pero no fue hasta el siglo XVIII con Linnaeus cuando se encontró un sistema de clasificación y lo más importante inventó un sistema de nomenclatura para los grupos animales. Ésto fue publicado en su gran obra Systema naturae , y su clasificación se basaba en el estudio de la morfología (estudio comparado de la forma de los organismos) para distribuir a los animales en colecciones. Dividió el reino animal en especies y le dio a cada una un nombre distinto. Agrupó a las especies en géneros, a los géneros en órdenes y a los órdenes en clases. Al ser su conocimiento de los animales bastante limitado, sus categorías inferiores, como los géneros, quedaban muy amplias, e incluían animales con relaciones muy lejanas. Aunque gran parte de su clasificación ha sufrido drásticas alteraciones, los principios básicos de su esquema siguen aún vigentes.
El sistema de Linneo es un sistema jerárquico . Las categorías principales o taxones fueron dotadas de rango taxonómico para indicar el grado en que contenían a otros grupos (por esto es jerárquico, y el rango será si está antes o después). Actualmente existen siete rangos taxonómicos, que son en serie descendente: reino, filo, clase, orden, familia, género y especie. Todo organismo que sea clasificado debe estar en los siete taxones: estos siete rangos son obligados. Aunque los taxónomos pueden dividir los rangos en subrangos o superangos (superclase, infraclase…) para aquellos organismos que formen parte de grupos muy grandes y muy complejos como son los peces e insectos.
Linneo ideó lo que se conoce como nomenclatura binomial por el cual a una especie se la designaba con dos palabras latinizadas, escritas en cursiva ( o subrayadas). La primera palabra es el Género (grupo de animales relacionados entre sí) y debe ir escrita su inicial en mayúscula y la segunda es el epíteto específico cuya inicial va escrita en minúscula. El género es siempre un sustantivo y el epíteto un adjetivo que debe coincidir en género y número con el sustantivo. Además para describir una nueva especie, a este nombre hay que añadir el nombre del descubridor y la fecha de descripción. Por ejemplo:
Scarabaeus sacer Linnaeus, 1758
Observar las comas.
La clasificación del reino animal como hemos dicho antes es jerárquica y se realiza según la relación evolutiva. Esta jerarquía está regulada por el Código Internacional de Nomenclatura Zoológica. (C.I.N.Z.)
TAXONES
1. Reino de los animales.
2. Tipo, Phyllum o Filo.
3. Subtipo.
—————->Superclase
4. Clases.
—————->Subclase
—————->Superorden
5. Orden.
—————->Suborden
—————->Superfamilia
6. Familia.
—————->Subfamilia
[Tribu]
7. Género.
—————->Subgénero
8. Especie.
9. Subespecie.
Ya sabemos que los nombres deben estar latinizados, pero también es importante conocer las terminaciones de los distintos grupos. Veámoslo con un ejemplo:
Scarabaeus sacer Linnaeus 1758
Para denotar la familia a la que pertenece tendríamos que añadir a la raíz de la palabra la terminación -idae, así la familia sería scarabaeidae; para la superfamilia sería -oidea, para la subfamilia, -inae. Para la tribu es -ini, y para la subtribu -ina.
También es importante tener en cuenta que el nivel genérico se compone de género y subgénero y que son generalizaciones de especies ya que en ningún caso estos niveles son especies.
Si por ejemplo tenemos en una especie dos o más subgéneros uno de ellos es siempre el subgénero nominado ya que es el género pero como subgénero también:
Por ejemplo tenemos el género Scarabaeus que posee dos subgéneros el Scarabaeus y el Ateuchus , pues el subgénero Scarabaeus es el nominado porque se menciona antes en el género.
Para determinar una especie se estudian series de individuos de dicha especie que se conoce como serie tipo. Pero hay que seleccionar como representante un individuo de dicha serie que se llamará holotipo y al resto de individuos paratipos. También se puede dar el caso de que haya una especie sin tipos ya que no fueron elegidos cuando se describió la especie, por lo general antiguamente. También se puede hablar de lectotipos que son los paratipos de una especie descrita anteriormente pero que en su momento no se designó paratipo o se ha perdido. El holotipo nuevo se llama neotipo.
Al existir subgénero y subespecie existen nomenclaturas adecuadas. En el caso de la subespecie, como en el caso del subgénero, también existe la subespecie nominada ya que si dividimos una especie habrá una subespecie que sea la especie:
La nomenclatura seria trinomial:
*Scarabaeus sacer alicantinus X, 1996
Al aparecer una nueva subespecie automáticamente se crea la subespecie nominada: Scarabaeus saccer saccer Linneo, 1758.
En el caso de los subgéneros, éstos pueden aparecer o no:
Scarabaeus (Ateuchus) laticollis Linneo, 1758
Se pueden dar casos de inestabilidad en la nomenclatura y éstos son:
- Sinonimia: describir una especie ya descrita. Puede ser objetiva (describe sobre la misma serie tipo) o subjetiva (con ejemplares diferentes)
- Nombre preocupados: nombres ya utilizados antes.
- Homonimia: darle un nombre preocupado a una especie nueva. Si surge una sinonimia, se le da el nombre de la sinonimia con la nueva fecha, sino se inventa nuevo nombre.
clasificación y nomenclatura animal