- El Parque Nacional de las Tablas de Daimiel constituye una Zona de Especial Protección para las Aves
- Las Tablas se considera de gran importancia por ser uno de los últimos tipos de ecosistema de tabla fluvial
- Los aportes hídricos provienen sobretodo de los ríos Guadiana-Azuer y el afluente Cigüela
En él se encuentra protegido el humedal las Tablas de Daimiel, situándose éste entre Daimiel y Villarrubia de los Ojos (Ciudad Real). También constituye una Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA) y Reserva de la Biosfera La Mancha Húmeda.
Las tablas fluviales
Las tablas se forman cuando los ríos se desbordan en sus tramos medios cuando estos no tienen suficiente pendiente que les lleven al océano; actualmente, Las Tablas de Daimiel se considera de gran importancia por ser uno de los últimos tipos de este ecosistema acuático que existen en España.
El problema del parque es la sobreexplotación de sus acuíferos, lo cual llevó la zona a una situación crítica sumándolo a los incendios de turbas 2009 debido a la gran escasez de agua.
Los ríos y afluentes que aportan recursos hídricos a la zona son el Guadiana-Azuer y el Cigüela. El Guadiana-Azuer es la suma de los Ojos del Guadiana más el río Azuer, llevando así todo el aporte hídrico a las Tablas: por otro lado, el Cigüela es considerado también un gran aporte que recibe agua de los afluentes más altos de las Tablas (entre Socuéllamos y Herencia).
Los más destacados afluentes que derivan al Cigüela son el Amarguillo, Záncara, Canal del Guadiana, Córcoles y Riánsares, aunque lo curioso es que no tienen un tramo definido que conecte con el Cigüela, sino que en épocas de lluvia inundaban una llanura aluvial (buscando así las aguas una pendiente natural).
Flora y Fauna del Parque Nacional de Las Tablas de Daimiel
Referente a la fauna, destaca la garza imperial como ave migratoria, el bigotudo, el pato cuchara, el buitrón, la cigueñela, la garza real, los martinetes, la garceta, el pato colorado, el avetoro, el zampullín chico, el alcotán la cerceta, el ánade silbón, el ánade friso, aguilucho lagunero, etc.
Entre los anfibios y reptiles se encuentran algunos como la rana común, ranita de San Antonio o la salamandra. De entre los mamíferos destacan el zorro, la nutria, el turón, conejos, liebres, comadrejas…
Por otro lado, la flora ha crecido intensamente gracias a las aguas dulces y salobres, las cuales han propiciado el crecimiento de masiega, marjales de carrizo, aneas, castañuelas; aunque las zonas más destacadas son las de pradera de carófitos.
Nivel de agua en el parque
Tras las lluvias de 2010 el Parque de las tablas volvió a inundarse y la superficie recuperó lo necesario desde el año 2004; aunque presumen que la completa restauración del Parque necesita más tiempo. Sin embargo, la concienciación de los municipios que lo rodean y el ambiente favorable, prometen un futuro positivo para el humedal.
El trabajo de ONGs como WWF, SEO, Ecologistas en Acción y la Asociación Ojos del Guadiana Vivos en este espacio protegido ha contribuido al proceso de recuperación que están experimentando en la actualidad, gracias a la mejoría del acuífero 23.
Imágenes de: Kyezitri, Alberto P. Veiga
La reintroducion del Castor europeo, sería un aporte importantísimo para el mantenimiento de los niveles de agua todo el año en el parque nacional.
La situación del Parque es aparentemente buena debida a la persistencia del Guadiana en su aporte de aguas al Parque, área crucial y originaria del Parque, que curiosamente no pertenece al parque. Pero la situación actual y previsiblemente futura es lamentable. Apenas hay vida bajo el agua a no ser la de grandes carpas que se comen las antiguas praderas de ovas. El parque es un ecosistema de embalse, no de tabla fluvial abierta.
Los riegos en los alrededores no han hecho sino aumentar, casi todos los pozos se encuentran legalizados y otros en víspera de serlo. Se ha fomentado el curltivo de la vid en espaldera y con riego. Ahora está triunfando el almendro y el pistacho, ambos cultivos adaptados al clima y a la sequía, pero al plantarse se riegan y luego si continúas obtienes más producción.
El agua del parque es un espejismo, el futuro, y más teniendo en cuenta que parece que hemmos entrado en un periodo seco, no es nada halagüeño.
Lo siento, no estoy nada de acuerdo con vuestro breve análisis y no hay que felicitar a nadie, es más el parque ni siguiera se ha visto crecido con una prolongación obligada y que es terreno de todos, el Dominio Público Hidráulico que metería en el Parque lugares y ecosistemas en verdadero peligro y merecedores de la más alta protección, aguas arriba y abajo del Parque.
O sea, ni el más mínimo motivo para ser optimista
Las Tablas de Daimiel son la referencia del turismo de naturaleza de nuestra provincia, así que debemos cuidarla como oro en paño. Este año, a pesar de haber sido un año seco, el acuífero 23 sigue con los mismos niveles. Incluso ha subido, lo que indica que se están haciendo las cosas bien y que hay una conciencia del valor ecológico que tenemos entre manos.